Si anhelamos crear un mundo sin violencia,
donde el respeto y la ternura logren reemplazar el miedo y el odio,
debemos comenzar con el trato que damos al comienzo de la vida.
Pues es ahí donde se cimientan nuestros patrones más profundos.
A través de estas raíces crece el temor y la enajenación,
o el amor y la confianza.
Suzenne Arms